El estado del madridismo puede resumirse en esta frase de Tomás Roncer(d)o: "El gol de Raúl al Borussia fue la única noticia buena para un madridismo que está sumido en un estado de depresión creciente" [As]. Y no es para menos: el Real Madrid fue incapaz de marcar un sólo gol al Levante.
Y aunque la prensa nacional-madridista intenta centrarlo todo en una “inexplicable” falta de acierto antes portería:
“El Madrid tiene la peor pegada de la Liga BBVA”
“Valdano: "El gol se nos está resistiendo"
Higuaín: "No entiendo cómo el año
pasado entraba todo y éste cuesta tanto"
Arbeloa: "Nos falta claridad para meter las ocasiones"”
“El 'Mou Team' sigue sin gol” "
Y todo parece ir acorde a la excusa de la semana de Mourinho: “Por no marcar goles ya hemos perdido cuatro puntos.” [Marca]
Pero la realidad es mucho más dura y el problema del Moudrid mucho más grave que una simple falta de pegada, como algún periodista se atreve a escribir: ” "El partido fue del Madrid, pero volvió a faltar criterio para tumbar el muro del Levante. El criterio que se esperaba de Özil, sobre todo, supuesto responsable del ritmo de toque blanco, en compañía de Khedira, otro jugador bastante plano en la creación. El joven turco-alemán sólo descarga su gran talento a cuentagotas y necesita mucha más resistencia para cuajar en esta Liga./
Dio 33 pases, que no son pocos en su media por encuentro, pero centros casi todos ellos sin explosión, sin derribar barreras ni tampoco para imponer jerarquía en la posesión. El conjunto granota enseñó las uñas en la medular y Özil apenas dejó dos perlas, sin verse atendido por Khedira. " [As]
Aunque hay algunos que cierran los ojos ante los problemas estructurales del Moudrid: “"No es una cuestión de esquema de juego ni de mentalidad. Ayer Mou alineó a cuatro futbolistas de corte ofensivo y llevó en todo momento la iniciativa del juego. Confluyen varios factores. Sobre todo, la falta de acierto individual y la excesiva dependencia que tiene el equipo de los goles de Cristiano Ronaldo." [Marca]
Otros realizan análisis más certeros: "Los equipos de Mourinho nunca han jugado como lo está haciendo este Madrid. La sensación que tenemos (incluidos jugadores) es que el equipo ha variado poco en relación al año pasado. Mourinho era consciente desde el principio de que iba a ser muy complicado cambiar la personalidad de sus delanteros y por eso entrena a sus seis defensores contra seis, siete, ocho... Como si supiera que no le iba a quedar más remedio que dar libertad a los cuatro de arriba y exigirles, pero poco a poco. Seguimos viendo que el equipo se parte. Por eso extraña que Mourinho haya preferido ser policía bueno con Cristiano (mientras lo es malo con Ramos o Benzema)." [As]
Es cierto que el Real Madrid ha perdido efectividad respecto a la temporada pasada, pero tal vez no sea sólo por una falta de acierto actual de sus delanteros, sinó también por un exceso de fortuna en la anterior.
Pero el principal problema es la ausencia de medular; a Mourinho parece estorbarle el centro del campo; sabe perfectamente lo que quiere en defensa, y sabe también lo que quiere en ataque, pero respecto al medio campo no tiene muy claro para qué sirve.
Parece que Mourinho no necesita el medio del campo, quiere delanteros que defiendan y defensas que ataquen (si eso también lo hace el Barcelona de Guardiola, pero ahora explicaré la diferencia); pero sin pasar/parar por el medio del campo, rápidamente hacia arriba y rápidamente hacia abajo, sin necesidad de construir. Lo vimos con el Inter y lo estamos viendo ahora.
Pero tal vez, incluso más que el pésimo juego, más llamativa es la pérdida del temor que provoca este Madrid a sus rivales respecto al de Pellegrini. Pellegrini no pudo con el FC Barcelona, ni con la Champions League, pero sus números eran impresionantes, y la mayoría de rivales en la Liga salían atemorizados; en cambio, este año, todos los equipos de la Liga estan capacitados para vencer al Moudrid actual, con un poco de acierto en ataque (cosa que no ha tenido ninguno de los rivales hasta ahora).
Los más fieles alaban la seguridad de la defensa de Mourinho, pero incluso resulta una alabanza un tanto precipitada; hasta ahora no hemos visto ningún rival con un ataque de entidad, y aun así el Moudrid ha concedido clarísimas ocasiones a sus rivales.
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