Real Moudrid y selección holandesa

Si no fuesen ustedes a calificarme de pretencioso, casi me atrevería a afirmar que John Carlin lee este blog. Se preguntarán porqué hago semejante afirmación. Dejen que se lo explique.

El pasado 19 de mayo publiqué una entrada en la que comparaba el juego del Real Madrid de Mourinho en sus cuatro enfrentamientos contra el FCB con el de la selección holandesa en la final del Mundial. De hecho en esa entrada hacía referencia a otra publicada el 12 de julio de 2010 en la que anticipaba que el RMA de Mourinho jugaría al límite (o más que al límite) del reglamento, pero que sus aficionados seguirían afirmando que los árbitros favorecían al FCB.

Lean lo que escribe hoy John Carlin en El País:

"Antes, un sondeo. Levanten la mano los aficionados del Madrid que aplaudieron la táctica y la actitud de los holandeses en Johanesburgo [en la final del Mundial]. Y levanten la mano los que celebraron el juego de su equipo contra el Barça en la ida de la semifinal europea. Se supone que habrá una sana convergencia de criterio, que veremos las mismas manos alzadas en ambos casos, ¿no? ¿O será (horror) que la afiliación tribal nubla la racionalidad de los futboleros? No, no puede ser. No seamos malpensados."

Además, más adelante, califica indirectamente la opción elegida por Mourinho como "cobarde":

"La alternativa del United, la opción cobarde, sería apostar por un fútbol destructivo y confiar en pillar al Barça al contraataque o en los penaltis."

Y termina con un párrafo aparentemente dedicado a los aficionados holandeses, pero que no requiere gran inteligencia para entender que tiene otros destinatarios más próximos:

"Ojalá que salgamos todos de la final de la Champions con nuestra fe en el fútbol reforzada, que gane el mejor y que el perdedor acepte el resultado con clase y elegancia y no se repita el caso de Holanda en el Mundial, cuando, después de ensuciar el partido, ensució el deporte atribuyendo su derrota al árbitro. Sus lloriqueos tuvieron eco entre algunos holandeses. El resto del mundo vio la victoria de España como una victoria del fútbol. Gane quien gane, que así sea el sábado en Wembley."